
Escáner: ACTUALIDAD, CONTEXTO, ANÁLISIS
PAKISTÁN. ISLAM Y LIBERTAD RELIGIOSA
Quemados vivos por ser cristianos

Paquistaníes de la minoría cristiana gritan consignas y muestran crucifijos durante una protesta contra la quema de viviendas de cristianos en la localidad de Gojra
Intolerancia. La ciudad paquistaní de Gojra, en el norte del país, permanece en tensión entre las protestas de los cristianos días después de que siete de ellos —incluidos tres mujeres y un niño— fueran quemados vivos el pasado sábado después de que una multitud atacara esta ciudad en protesta por una presunta blasfemia, informa el diario local ‘Daily Times’, que señala que al menos 90 personas han resultado heridas.
47 casas fueron incendiadas en Korian el pasado 30 de julio como consecuencia de los disturbios creados en Gojra. Los cristianos de Korian han abandonado la aldea por miedo y no mantienen contacto con nadie
Al parecer, la violencia comenzó el pasado jueves en Gojra después de que se corriera el rumor de una profanación contra una copia del Corán durante la ceremonia de una boda. Al suceso le siguieron dos días de violencia en los que una multitud prendió fuego a un gran número de casas, quemando vivos a siete residentes. Los responsables gubernamentales han dicho que las investigaciones preliminares muestran que no se produjo una blasfemia sobre el Corán y que se fabricó un “rumor” por parte de elementos proscritos para crear el caos.
El Ejército paquistaní mantiene hoy cercada la nororiental de Gojra. Las calles de Gojra, en la oriental provincia paquistaní de Punjab, permanece repleta de militares ante el temor de un brote de violencia entre musulmanes y cristianos, que exigen venganza por la matanza. Un portavoz de las fuerzas de seguridad en Gojra aseguró que el ejército mantiene la situación bajo control, pese a que los cristianos recorrieron esta mañana la ciudad con los cadáveres para exigir el arresto de los responsables.
La Policía ha registrado una denuncia contra algunos responsables gubernamentales y cerca de 800 hombres sin identificar, mientras los líderes de la comunidad cristiana han pedido justicia para los que están detrás de los asesinatos. “Las escuelas cristianas estarán cerradas durante tres días para llorar la muerte de las personas inocentes en Gojra”, afirmó el obispo Sadiq Daniel, que dirige la diócesis de Karachi. “No hay prueba de blasfemia, pero si alguien lo ha hecho sólo él, y no toda la comunidad, debería ser castigado”.
La profanación del Corán se castiga con la muerte en Pakistán. Pakistán es un país predominantemente musulmán, y las minorías religiosas, incluidos los cristianos, suman el cuatro por ciento de la población de 170 millones de personas.
:: Llamamiento a la calma
Benedicto XVI pide libertad religiosa para los cristianos perseguidos
Los diarios paquistaníes hacían hoy una petición a los clérigos musulmanes para que llamaran a la calma y a la contención. Los clérigos habían solicitado un castigo en el caso de que la profanación hubiera tenido lugar, pero pidieron a la comunidad musulmana que no tomara la ley por su mano. “Todos los musulmanes de Pakistán deben dar una protección completa a los no musulmanes inocentes y desempeñar su función religiosa y nacional para poner freno a todo tipo de daños”, señalaba la petición.
:: Situación tensa
Los residentes de Gojra, situada a 160 kilómetros de Lahore, indicaron que la situación sigue “bastante tensa” . Otra multitud ha atacado una iglesia en la aldea de Khaga. La Policía ha afirmado que ha arrestado a unas 100 personas y ha levantado barreras en los “puntos sensibles” de la ciudad, mientras las patrullas vigilan las calles de la ciudad y los cristianos han bloqueado la principal vía ferroviaria. Un concejal local para las minorías, Fenias Masih, declaró que la situación en la zona es “bastante mala” y que la gente está “aterrorizada”. También indicó que 47 casas fueron incendiadas en Korian el pasado 30 de julio como consecuencia de los disturbios creados en Gojra, e indicó que los cristianos de Korian han abandonado la aldea por miedo y no mantienen contacto con nadie.
Otro activista pro Derechos Humanos, Sohail Johnson, residente en la ciudad de Lahore, capital del Punjab paquistaní, afirmó que “los jóvenes cristianos están realmente enfadados (…), el Gobierno necesita tomar medidas sólidas para controlar la situación”. El ministro de Justicia de Punjab, Rana Sanulá, afirmó que se realizará una investigación judicial sobre este asunto y que se llevará a los responsables ante la justicia.