
Escáner: ACTUALIDAD, CONTEXTO, ANÁLISIS
DETENCIÓN DE ETARRAS
Fiambreras para todos. El regalo de ETA

Terrorismo y crimen. Los etarras detenidos en Francia tenían en su poder una veintena, de fiambrera —los famosos tupper— preparados para estallar y 42 detonadores industriales. Necesitaban conectar el detonador y añadir la carga explosiva. Era el nuevo regalo que ETA nos dispensaba. Los explosivos y los detonadores viajan por un lado, las fiambreras por otro, y en algún lugar, en algún punto siniestro, el comando operativo, cuando se ha elegido la víctima, monta el regalito y lo adhiere a lo que quiere dejara hechos añicos y descuartizar. Los descuartizadores se habían alejado de su habitual refugio, los pirineos franceses, para instalarse en la Saboya (Alpes franceses).
Aitzol Etxaburu, Alberto Machaín y Andoni Sarasola, administraban un zulo en el que la policía francesa encontró 100 kilos de nitrato amónico y 12 litros de nitrometano
Los descuartizadores detenidos, Aitzol Etxaburu, Alberto Machaín y Andoni Sarasola, administraban un zulo en el que la policía francesa encontró 100 kilos de nitrato amónico y 12 litros de nitrometano (un combustible de aeromodelismo utilizado como reforzador de los explosivos). El zulo, lógicamente, estaba ubicado en la localidad de Ferrieres, en los Pirineos, muy cerca de la frontera española.
Aitzol Etxaburu, considerado uno de los dirigentes de la actual estructura terrorista de ETA, era el último de los seis etarras que en el verano de 2007 aparecieron en un cartel difundido por las Fuerzas de Seguridad. A este respecto, Rubalcaba, en su comparecencia ante la prensa, para hablar de las detenciones practicadas por la policía francesa, ha afirmado que haciendo un cálculo a “grosso modo”, “cada cuatro meses se ha detenido a uno de los terroristas más buscados”. Aitzol Etxaburu estaba huido desde el año 2005 y sería actualmente el jefe de Logística del aparato militar de ETA.
Alberto Machaín Beraza, a su vez, formaba parte de sexteto de terroristas más buscados, que aparece en los carteles difundidos por el Ministerio del Interior tras el atentado contra el cuartel de la Guardia Civil en Calvià (Mallorca), que costó la vida a dos guardias civiles.
Por el momento, no hay “ninguna evidencia” que vincule a los tres etarras con esos asesinatos y los cuatro artefactos explosivos en diferentes bares y restaurantes de Palma y en unas galerías comerciales de la capital balear. En todo caso, Rubalcaba dijo que se investigará el “abundante material informático” hallado en poder de los arrestados.
El tercer terrorista detenido es Andoni Sarasola, hermano de Martín Sarasola, etarra condenado por el atentado contra la T-4 de Barajas que mató a dos ciudadanos ecuatorianos. Andoni Sarasola fue cabeza de lista de Lesakako Abertzale Sozialista, candidatura de la izquierda abertzale presentada en las municipales de 2007, anulada por los tribunales.
Rubalcaba ha reconocido e insistido en que “ETA va a volver a atentar”, pero ha recordado “que las Fuerzas de Seguridad van a trabajar para que no lo consigan y así será hasta que esto termine”.