


Enriquecimiento de uranio. El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, anuncia el comienzo del proceso de enriquecimiento a nivel nacional de combustible nuclear para el reactor de Teherán, una decisión que podría suponer un golpe casi irremediable a las negociaciones con la comunidad internacional para enriquecer su uranio en el extranjero. Este combustible nuclear era el que las potencias internacionales deseaban proporcionar a Irán a cambio de que las autoridades de Teherán les dieran su uranio de bajo enriquecimiento a un 3,5 por ciento, del que se sospecha que podría ser empleado en la fabricación de un arma de destrucción masiva, que Irán recibiría después con un enriquecimiento del 20 por ciento para utilizarlo en sus reactores y convertirlo en isótopos médicos con uso civil, despejando dudas sobre las intenciones pacíficas de su programa nuclear.
“He pedido al doctor (Alí Akbar) Salehi que se empiece a trabajar en la producción de combustible al 20 por ciento a través del uso de las centrifugadoras”, anunció Ahmadineyad en relación al director del organismo nuclear iraní
“He pedido al doctor (Alí Akbar) Salehi que se empiece a trabajar en la producción de combustible al 20 por ciento a través del uso de las centrifugadoras”, anunció Ahmadineyad en relación al director del organismo nuclear iraní. “Le habíamos dicho a Occidente que viniera e hiciera el intercambio, pero sabiendo que podíamos enriquecer nosotros mismos el combustible al 20 por ciento”, aseguró el presidente en un discurso televisado. “Les dimos de dos a tres meses de plazo. Y ellos comenzaron un nuevo juego. Por eso le pedí al doctor Salehi que comenzara a trabajar en la producción del combustible”.
“Las puertas a la interacción todavía están abiertas”, añadió Ahmadineyad, quien especuló con la posibilidad de emplear tecnología láser para enriquecer el uranio, pero no dio mas detalles. Con estas declaraciones, se aleja la posibilidad de un acuerdo en este sentido a pesar de que esta semana el Gobierno iraní se había pronunciado positivamente a su favor. Sin embargo, el sábado el propio secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates, tachó de “decepcionante” la respuesta final dada por Irán respecto a esta negociación, marcada por los desacuerdos entre las partes negociadoras en cuanto a las cantidades de uranio a entregar y recibir.
:: EE UU pide más presión sobre Irán
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Robert Gates, instó este domingo a la comunidad internacional a aumentar la presión sobre el Gobierno iraní, más que sobre su gente, para poner límite a las ambiciones nucleares de Irán. “Si la comunidad internacional se junta y genera presión para enfrentar al Gobierno iraní, creo que aún hay tiempo para sanciones”, dijo Gates. “Pero todos tenemos que trabajar juntos”, agregó el funcionario en una rueda de prensa en Roma. “La presión focalizada en el Gobierno de Irán, en lugar de en la gente de Irán, tiene potencialmente más oportunidades de alcanzar ese objetivo”.
:: Alemania llega al límite de su paciencia
El ministro de Defensa alemán, Karl-Theodor zu Guttenberg, pidió este domingo a la comunidad internacional que haga entender a Irán que se encuentran “en el límite de la paciencia” de los negociadores occidentales sobre su programa nuclear y amenazó abiertamente con la posibilidad de sanciones contra la República Islámica por su programa nuclear. “Puede ser que tengamos que girar las tuercas de las sanciones por algún lado u otro”, declaró Guttenberg durante el transcurso del día de clausura de la 46 Conferencia de Seguridad que se celebra en Múnich.
A pesar de solicitar una revisión cuidadosa de la situación —”Tenemos que considerar con mucho cuidado el impacto que pudieran tener nuestras opciones—, el ministro alemán reconoció que la problemática nuclear de Irán se aproxima a un punto casi sin retorno. “Hay que dejar claro a Irán que se encuentra en el límite de nuestra paciencia”, remarcó.
:: Londes advierte a Irán
El Gobierno británico ha advertido este domingo de que la decisión de Irán de enriquecer uranio a nivel doméstico para obtener combustible nuclear contraviene cinco Resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. “Los informes de que Irán está planeando enriquecer parte de su combustible hasta el 20 por ciento son claramente un asunto que causa seria preocupación”, declaró el Foreign Office en un comunicado. “Esto supondría una violación deliberada de cinco resoluciones. Habrá que considerar nuestra respuesta en conjunción con la Agencia Internacional de la Energía Atómica y el 3+3 (el conocido como grupo de contacto 5+1 formado por Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Rusia y China más Alemania)”.
